Las redes sociales dañan seriamente la salud, lo dicen “las instagramers”.
Un estudio publicado en la revista Computers and Human Behaviour hace dos años concluía que quienes utilizaban habitualmente varias plataformas sociales tenían un riesgo tres veces mayor de sufrir depresión y ansiedad.
Los principales motivos eran el ‘ciberacoso’, la percepción distorsionada de las vidas de los demás y la sensación de que malgastaban su tiempo en las redes.
Psicólogos de la Universidad Penn State (EE.UU.) percibieron, trabajando con usuarios diarios de redes, que contemplar y juzgar la fotos de otras personas induce a la comparación, lo que a menudo menoscaba la autoestima.