Un punto clave cuando nos enfrentamos a un proceso de divorcio es la forma en la que les contamos a nuestros hijos la situación, hay que saber gestionarlo de manera adecuada para que el niño comprenda lo ocurrido y sea consciente de los cambios que se van a producir en su vida a partir de ese momento dado que de esta manera lo aceptará y se adaptará con más facilidad a la nueva situación.